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CAPÍTULO II

ACTIVIDADES DE LA CIDH 

          A partir del mes de noviembre de 1984, fecha en la que se cerraron las actividades cubiertas en el anterior Informe Anual, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos celebró tres períodos de sesiones: el sexagésimo tercero, sexagésimo cuarto y el sexagésimo quinto.  Los períodos de sesiones mencionados, se llevaron a cabo en la sede de la Comisión, la Secretaría General de la Organización de los Estados Americanos, Washington, D. C. 

          En el mes de noviembre se llevó a cabo en Brasilia la Asamblea General.    La Asamblea General aprobó importantes resoluciones en materia de derechos humanos, las cuales se transcriben este capítulo. 

          Asimismo, se efectuaron visitas de observación in loco en Suriname y Guatemala, de las cuales se hace una síntesis en el presente capítulo, así como de los períodos de sesiones referidos en el primer párrafo. 

          En las sesiones inaugurales de los tres períodos de sesiones estuvieron presentes el Presidente del Consejo Permanente y el Secretario General de la Organización.  En tales actos inaugurales, estas destacadas personalidades señalaron la efectiva labor de la Comisión. 

          En cada uno de estos períodos de sesiones el Presidente y el Secretario Ejecutivo de la Comisión presentaron, de conformidad con las disposiciones reglamentarias, sus respectivos informes.

 

A.            SESAGÉSIMOTERCERO PERÍODO DE SESIONES 

Este período de sesiones se celebró del 24 de septiembre al 5 de octubre de 1984, en su sede, la ciudad de Washington, D. C.  Participaron todos sus miembros: Dr. César Sepúlveda, Presidente; Dr. Luis Demetrio  Tinoco Castro, Primer Vicepresidente; Dr. Luis Adolfo Siles Salinas, Segundo Vicepresidente; Dr. Andrés Aguilar; Dr. Marco Gerardo Monroy Cabra; Dra. Gilda Maciel Russomano y Sr. Bruce McColm. 

          La Comisión aprobó el Informe Anual a la Asamblea General de la Organización el que fue sometido a su consideración en el decimocuarto período ordinario de sesiones.  Asimismo, la Comisión aceptó una invitación del Gobierno de Suriname para practicar una observación in loco en dicho país, proponiendo el mes de enero de 1985 para efectuarla. 

          La Comisión consideró la invitación que le había formulado el Gobierno de Grenada para visitar ese país y decidió llevar a cabo esa visita una vez que se efectuasen las elecciones en tal país, sin perjuicio de enviar observadores a los juicios que se habían anunciado se seguirían en contra de aquellos acusados de tener responsabilidad en la muerte del ex-Primer Ministro Maurice Bishop y algunos de sus colaboradores. 

          También la Comisión Interamericana de Derechos Humanos en su 63º período de sesiones adoptó la Resolución Nº 17/84 relativa al caso  del periodista Stephen Schmidt en la República de Costa Rica.  La CIDH aprobó por 5 votos a favor, con un voto disidente y una abstención dicha resolución. La Comisión declaró en la citada decisión que la Ley 4420 de 18 de septiembre de 1969, orgánica del Colegio de Periodistas de Costa Rica, así como las normas que la reglamentan y la sentencia dictada por la Sala Tercera de la Corte Suprema de Justicia de la República de Costa Rica de 3 de junio de 1983 por la que se condenó el señor Spehen Schimidt a tres meses de prisión por el ejercicio ilegal de la profesión de periodista, así como los demás hechos establecidos en la petición, no constituyen violación del Artículo 13 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, referente a la libertad de pensamiento y de expresión.  El texto de esta resolución aparece en el Capítulo III de este Informe. 

          Por otra parte, durante este período de sesiones se analizaron otros asuntos de carácter general concernientes a la protección de derechos humanos.  A ese respecto se trató lo relativo a la aplicación de la pena de muerte, acordando hacer un llamado a todos los Estados Americanos, que aún no lo hubiesen hecho, a que, siguiendo el espíritu del Artículo 4 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y la tendencia universal favorable a la supresión de la pena de muerte, procedan a su abolición. 

          La Comisión, además, de conformidad con las normas que la rigen  --la Convención, su Estatuto y Reglamento—consideró diversas peticiones que contenían denuncias de alegadas violaciones de derechos humanos, adoptando respecto de algunas de ellas las correspondientes resoluciones, las cuales aparecen en otra parte de este Informe.  Como es habitual también en los períodos de sesiones, la Comisión recibió en audiencia a personas y representantes de instituciones que así lo habían solicitado.

 

B.            DÉCIMOCUARTO PERIODO DE SESIONES DE LA ASAMBLEA GENERAL 

          Del 12 al 17 de noviembre de 1984 se llevó a cabo en Brasilia el decimocuarto período de sesiones de la Asamblea General de la OEA.  La CIDH estuvo representada por su Presidente, Dr. César Sepúlveda y la Dra. Gilda Russomano, acompañados del Secretario Ejecutivo, Dr. Edmundo Vargas Carreño.

          De conformidad con la agenda de la Asamblea General, ésta consideró los siguientes temas vinculados con la Comisión: 

a)          Informe Anual de la CIDH 1983-1984 (documento AG/doc. 1778/84) 

b)          Informe Especial de la Comisión sobre la Situación de los Derechos Humanos de un Sector de la Población Nicaragüense de Origen Miskito.  Este informe fue publicado también, posteriormente, en idioma miskito, lo que constituye el primer documento que la OEA publica en idioma indígena. 

c)          Veinticinco Años de Actividades de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. 

Por otra parte, la Asamblea General de la OEA, en su XIV Período Ordinario de Sesiones aprobó sobre los temas precedentemente enumerados, las resoluciones cuyos textos se transcriben a continuación:

 

AG/RES. 742 (XIV-0-84)
INFORME ANNUAL DE LA COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS
 

(Resolución aprobada en la octava sesión plenaria,
celebrada el 17 de noviembre de 1984)

 

LA ASAMBLEA GENERAL, 

VISTOS:

 

          El Informe Anual de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (AG/doc.1778/84), y el informe especial de la misma Comisión (AG/doc.1779/84), y las observaciones y réplicas de gobiernos, y 

CONSIDERANDO: 

          Que la protección y vigencia de los derechos humanos constituye una de las más altas finalidades de la Organización de los Estados Americanos y su observancia es fuente de solidaridad entre los Estados miembros así como garantía de respeto a la vida humana y a la dignidad del hombre; 

          Que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos tiene como finalidad principal promover el respeto y la defensa de los derechos humanos en todos los Estados miembros; 

          Que la estructura democrática es un elemento esencial para el establecimiento de una sociedad política donde se puedan realizar plenamente los valores humanos; 

          Que es necesario resaltar como un hecho positivo la evolución ya iniciada o ya completada en algunos países para volver a la democracia; 

          Que también constituyen un hecho positivo las medidas adoptadas en determinados países que contribuyen de manera significativa al respeto de los derechos enunciados en la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y en la Convención Americana sobre Derechos Humanos, Pacto de San José, pese a lo cual aún persisten situaciones que afectan el respeto de los derechos de la persona humana, la dignidad del hombre, la seguridad e integridad personal, así como los valores de la democracia, incluida la justicia social; 

          Que la Comisión, en su Informe Anual de 1983-84, indica detalladamente que en algunos países del Hemisferio se han producido graves violaciones de los derechos humanos como son las muertes causadas por acciones imputables a autoridades gubernamentales; la detención de personas sin proceso; su sometimiento a juicios investigatorios policiales carentes de las garantías mínimas exigidas por la adecuada administración de justicia; las expulsiones administrativas de nacionales, los obstáculos interpuestos al derecho de la libertad religiosa y de culto; y las serias restricciones impuestas a la libertad de opinión, expresión y difusión del pensamiento y a los derechos políticos; 

          Que aún continúa la práctica de la desaparición forzada de personas y en la mayoría de los casos las desapariciones no han logrado esclarecerse; 

          Que tal práctica constituye un cruel e inhumano procedimiento con el propósito de evadir la ley, en detrimento de las normas que garantizan la protección contra la detención arbitraria y el derecho a la seguridad e integridad personal; 

          Que es necesario reiterar la importancia de los derechos económicos, sociales y culturales en el contexto de los derechos humanos para el desarrollo integral de la persona humana; 

          Que el capítulo V del Informe Anual de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos hace referencia a la urgencia de dar solución apropiada a los problemas derivados del desplazamiento masivo de personas en el Hemisferio, tomando en consideración la nueva realidad que ha surgido en los últimos años en materia de refugiados y desplazados; 

          Que la Comisión señala en el Capítulo V de su Informe Anual, la necesidad de que los Estados miembros y los órganos y organismos del sistema presenten proposiciones específicas sobre el contenido del Protocolo Adicional al Pacto de San José en lo que se refiere a los derechos económicos, sociales y culturales, y 

          Que, asimismo, la Comisión señala la urgencia de poner mayor énfasis en el tema de la enseñanza de los derechos humanos para difundir las normas y principios referentes a su protección. 

RESUELVE: 

1.          Tomar nota con interés del Informe Anual, y del informe especial y de las recomendaciones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y manifestarle su agradecimiento y felicitación por la seria e importante labor que realiza en el campo de la protección y promoción de los derechos humanos. 

          2.          Exhortar a los gobiernos de los Estados mencionados en el Informe Anual para que acojan las correspondientes recomendaciones de la Comisión, de acuerdo con sus preceptos constitucionales y sus legislaciones internas, a fin de garantizar la fiel observancia de los derechos humanos consagrados en la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y en la Convención Americana sobre Derechos Humanos. 

          3.          Tomar nota de los comentarios y observaciones de los gobiernos de los Estados miembros y de las informaciones sobre las medidas que han tomado y continuarán poniendo en práctica para afianzar los derechos humanos en sus países. 

          4.          Reiterar que la práctica de la desaparición forzada de personas en América es una afrenta a la conciencia del Hemisferio y constituye un crimen de lesa humanidad. 

          5.          Exhortar a aquellos Estados donde han ocurrido desapariciones de personas, que se esclarezca su situación y se informe a sus familiares sobre su muerte. 

          6.          Reiterar la necesidad de evitar y, en su caso, poner inmediato término a las violaciones de derechos humanos, en especial a los de los derechos a la vida, a la integridad y a la libertad personal; al derecho a la justicia y proceso regular; y reafirmar que la ejecución sumaria, la tortura y la detención sin debido proceso constituyen gravísimas violaciones de los derechos humanos. 

7.          Recomendar a los Estados miembros que aún no lo han hecho, que restablezcan y perfeccionen el sistema de democracia representativa, surgido de elecciones libres y mediante el sufragio universal y secreto; sin perjuicio de lo anterior, se tomarán en cuenta las características y circunstancias propias de cada país respetando sus legislaciones respectivas y, en todo caso, se dará acceso a todos los ciudadanos a los medios de comunicación social y deberán ellos gozar de las demás garantías indispensables para que los resultados de la elección representen la voluntad popular. 

8.          Recordar a los Estados miembros la necesidad de garantizar el ejercicio pleno de la libertad de conciencia, de religión y de culto, así como de la libertad de investigación, opinión, expresión y difusión del pensamiento, teniente presente la Declaración Americana de Derechos y Deberes del Hombre y la Convención Americana sobre Derechos Humanos. 

          9.          Reafirmar que un aspecto de la  protección efectiva de los derechos humanos debe ser el reconocimiento de los derechos de carácter social, económico y cultural, señalando la responsabilidad que tienen los Gobiernos de los Estados miembros en el proceso de promover la cooperación para el desarrollo hemisférico. 

          10.          Reiterar al Consejo Permanente su solicitud de que rinda un informe al decimoquinto período ordinario de sesiones de la Asamblea General sobre el estado de los trabajos relacionados con el grave problema de los refugiados y de los desplazamientos masivos de personas en el Hemisferio teniendo presente las recomendaciones de la Comisión formuladas en el Capítulo V de su Informe Anual. 

          11.          Tomar nota con satisfacción de la decisión de los Gobiernos de los Estados miembros que han invitado a la Comisión a visitar sus respectivos países y exhortar a los Gobiernos de los Estados que todavía no han aceptado o convenido la fecha para esa visita a que lo hagan a la brevedad posible. 

          12.          Invitar a los Estados miembros y a los órganos y organismos interesados a que presenten al decimoquinto período ordinario de sesiones de la Asamblea General proposiciones específicas sobre el contenido del proyectado Protocolo Adicional a la Convención Americana sobre Derechos Humanos en materia de derechos económicos, sociales y culturales, especialmente en lo que se refiere a la definición de los derechos objeto de protección y a los mecanismos institucionales que deberían establecerse para lograr la adecuada protección de los mismos. 

          13.          Exhortar a los Estados miembros a incorporar, como materia lectiva en sus programas oficiales de estudio, tanto primarios como secundarios, la enseñanza de los derechos humanos, teniente presente los respectivos ordenamientos constitucionales y los correspondientes instrumentos internacionales. 

          14.          Solicitar a la Comisión que continúe observando la situación de los derechos humanos en los Estados miembros que ella considere apropiados y que informe al respecto al decimoquinto período ordinario de sesiones de la Asamblea General. 

          15.          Invitar a los Gobiernos de los Estados miembros que aún no lo han hecho a que consideren la conveniencia de adherir o ratificar la Convención Americana sobre Derechos Humanos. 

          16.          Exhortar a todos los gobiernos a que presten a la Comisión la cooperación necesaria para el cumplimiento adecuado de su labor, en especial mediante la oportuna respuesta a las solicitudes de información requeridas por la Comisión.

 

AG/RES. 744 (XIV-0-84) 

VEINTICINCO AÑOS DE ACTIVIDADES DE LA
COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS 

(Resolución aprobada en la octava sesión plenaria, celebrada el 17 de noviembre de 1984)

 

LA ASAMBLEA GENERAL, 

CONSIDERANDO: 

          Que este año se cumplen los veinticinco años de actividades de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, creada por la Resolución de la Quinta Reunión de Consulta de Ministros de Relaciones Exteriores, celebrada en Santiago de Chile en el año 1959, y 

          Que la protección y vigencia de los derechos humanos constituye una de las más altas finalidades de la Organización de los Estados Americanos y su observancia es fuente de solidaridad entre los Estados miembros, así como garantía de respeto a la vida humana y a la dignidad del hombre, 

RESUELVE: 

          1.          Felicitar, con agradecimiento, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos por la importante labor desarrollada en cumplimiento de su mandato de promover y defender los derechos humanos durante los veinticinco años de sus actividades. 

          2.          Expresar su firme apoyo a la Comisión por la labor realizada y reafirmar la importancia que sus informes tienen para la defensa de los derechos humanos. 

          3.          Exhortar a todos los Gobiernos que continúen prestando a la Comisión la cooperación necesaria para el cumplimiento de su labor.

 

C.            OBSERVACIÓN IN LOCO EN SURINAME 

          La Comisión fue invitada por el Gobierno de Suriname el 1º de agosto de 1984 para efectuar una visita de observación in loco en aquel país.  Al aceptar dicha invitación, la Comisión sugirió el mes de enero de 1985 para la misma y de común acuerdo con el Gobierno se señaló la semana del 12 al 17 de enero. 

          Previamente a la visita, los días 8 a 10 de enero, una comisión especial de la CIDH sostuvo audiencias en Amsterdam, Holanda, para oír testimonio de surinameses que alegaban violaciones de derechos humanos por parte del Gobierno de Suriname ocurridas con posterioridad a la primera visita de la Comisión a aquel país.  Esta comisión especial estuvo integrada por el Dr. César Sepúlveda, Presidente y por el Dr. Luis Adolfo Siles Salinas, Segundo Vicepresidente, asistidos por el Dr. David Padilla, Secretario Ejecutivo Adjunto de la CIDH y el Dr. Claudio Grossman que sirvió como intérprete. 

          El 11 de enero los integrantes de la comisión especial, con excepción del Dr. Sepúlveda, viajaron a Paramaribo, Suriname donde se reunieron con el Sr. Bruce McColm, miembro de la Comisión, el Dr. Ernst Brea y la Sra. Diana Decker del personal de la Secretaría Ejecutiva.  Posteriormente, se unió el Dr. Edmundo Vargas Carreño, Secretario Ejecutivo. 

Los integrantes de la comisión especial desarrollaron un elaborado programa que se había preparado previamente para la visita, la que incluyó entrevistas con el Primer Ministro (interino) E. L. Tjon Kie Sim, en ausencia del titular Sr. Wim Udenhout y el Presidente de la República (interino) L. F. Ramdat Misier, el Primer Juez de la Corte Suprema (interino), Sr. Oosterling; con los siguientes Ministros de Gobierno: de Trabajo, Sr. Siegfried Gilds; de Justicia, Sr. Frank J. Leeflang y del Ejército y de Policía, Sr. W. P. Maynard, así como con líderes de grupos religiosos, políticos, laborales, de la prensa, universitarios y profesionales.  También se efectuaron visitas a instalaciones militares y a las prisiones en Fort Zeelandia, Santo Boma y Membre Boekoe Kazerne.  Asimismo un subgrupo viajó al interior del país visitando la comunidad de negros cimarrones (Bush Negro) llamada Driettabeje y una población conocida con el nombre de negros cimarrones de Tepoe.  A su vez se observaron varios proyectos especiales subvencionados por el Gobierno tales como guarderías infantiles, leproserías y asilos de ancianos. 

          La visita concluyó el 18 de enero habiéndose celebrado una conferencia de prensa y emitiéndose un comunicado de prensa sobre la visita.  La Comisión ha presentado ante esta Asamblea General, por separado, un informe especial de esta comisión especial (OEA Ser.L/VII.65, doc.11).

 

D.            SEXAGÉSIMOCUARTO PERÍODO DE SESIONES 

          La Comisión celebró su 64º período de sesiones del 4 al 8 de marzo de 1985 en su sede en Washington, D. C.  En esta oportunidad participaron el Presidente, doctor César Sepúlveda, y los miembros doctores Andrés Aguilar, Marco Gerardo Monroy Cabra, Gilda M. Russomano y Bruce McColm. 

          Durante el curso de este período de sesiones la Comisión tuvo el agrado de recibir al Presidente de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, doctor Pedro Nikken y a los jueces Thomas Buergenthal, Rafael Nieto y Carlos Roberto Reina, así como al Secretario de la Corte, doctor Charles Moyer, con quienes la Comisión intercambió puntos de vista sobre asuntos de interés común para los dos órganos de protección a los derechos humanos establecidos por el Pacto de San José de Costa Rica. 

          También la Comisión presentó en una ceremonia especial que tuvo lugar el 7 de marzo y que contó con la presencia del Secretario General de la Organización, Embajador João Clemente Baena Soares, el Secretario General Adjunto, Val T. McComie y varios diplomáticos acreditados ante la Organización, el libro “Derechos Humanos en las Américas” que la Comisión  ha publicado como homenaje a la memoria de su antiguo miembro profesor Carlos A. Dunshee de Abranches.  Dicho libro contiene 30 artículos de juristas de varios países americanos que se refieren a diversos aspectos del sistema interamericano de protección y promoción de los derechos humanos. 

          En este período de sesiones, la Comisión recibió el Informe que le rindió la comisión especial que en el mes de enero visitó Suriname con el objeto de estudiar in situ la situación de los derechos humanos en dicho país.  La Comisión, en vista de la urgencia e importancia de esa situación, adoptó algunas recomendaciones provisionales para lograr mejoras inmediatas en materia de derechos humanos, las que sometió al Gobierno de Suriname. 

          Asimismo, la Comisión consideró la invitación que le había formulado el Gobierno de Guatemala para visitar ese país, a fin de observar los progresos que se hubiesen logrado en el campo de los derechos humanos.  La Comisión decidió en esta ocasión llevar a cabo esa visita durante el curso del mes de mayo. 

          La Comisión en esa oportunidad también continuó la elaboración de un informe sobre la situación de los derechos humanos en otros Estados miembros de la Organización adoptando al respecto diversas medidas las que fueron comunicadas a los respectivos gobiernos. 

          Por otra parte, la Comisión procedió a efectuar algunas reformas a su Reglamento las que fueron comunicadas oportunamente a los Gobiernos de los Estados miembros y publicadas en la nueva edición, actualizada al 1º de julio de 1985 del “Manual de Normas Vigentes en Materia de Derechos Humanos en el Sistema Interamericano” (OEA/Ser.L/V.II.65, doc. 6, 7/1/85). 

          La Comisión, de conformidad con las correspondientes normas de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, su Estatuto y Reglamento, consideró diversas peticiones que contenían alegadas denuncias sobre violaciones de derechos humanos, adoptando respecto de algunas de esas peticiones las correspondientes resoluciones.  Como es habitual en sus períodos de sesiones, recibió en audiencia a personas y representantes de instituciones que oportunamente se lo solicitaron.

 

E.            OBSERVACIÓN IN LOCO EN GUATEMALA   

          Una Comisión Especial de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, integrada por los Doctores César Sepúlveda, Andrés Aguilar, Marco G. Monroy Cabra y Bruce McColm, efectuó por invitación del Gobierno de Guatemala, una observación in loco en dicho país entre los días 6 y 10 de mayo del presente año. 

          Durante su permanencia en territorio guatemalteco, la Comisión Especial mantuvo entrevistas con el Jefe de Estado; con el Presidente de la Asamblea Nacional Constituyente y con la Comisión de Derechos Humanos de dicha Asamblea; con el Presidente de la Corte Suprema de Justicia; con el Presidente y Miembros del Tribunal Electoral; con el Procurador General de la Nación y con los Ministros de Relaciones Exteriores, de Gobernación y de Educación.  Además, la Comisión Especial se entrevistó con el Presidente del Comité de Reconstrucción Nacional; con el Director de la Policía Nacional; con el Jefe del Departamento de Investigaciones Técnicas de dicha Policía; con el Jefe del Servicio de Medicina Forense del Organismo Judicial y con el Director General de Planificación Regional; así como con otras autoridades civiles y militares, tanto nacionales como departamentales. 

          También, la Comisión Especial de la CIDH visitó los Centros Penitenciarios y de Detención: la Granja de Rehabilitación Pavón y el Segundo Cuerpo de Policía de la Capital. 

          Fuera de la ciudad de Guatemala, la Comisión Especial visitó también algunos de los denominados Polos de Desarrollo ubicados en el Triángulo Ixil, en el Departamento del Quiché, concretamente las siguientes localidades: San Felipe de Chenlá, Tzalbal, Acul y el Campo de Refugiados de Acumbal. 

          Igualmente la Comisión Especial sostuvo reuniones con personalidades y representantes de diversas instituciones políticas, religiosas, humanitarias, de medios de comunicación social, profesionales, empresariales y sindicales, de todas las cuales recibió su importante información acerca de la realidad guatemalteca en materia de derechos humanos. 

          Asimismo, la Comisión mantuvo en la Capital, en forma permanente, una oficina de recepción de denuncias sobre presuntas violaciones de derechos humanos.  Tales denuncias han sido tramitadas de conformidad con las normas legales aplicables.  El Gobierno de Guatemala se ha comprometido con la Comisión a no tomar represalias respecto de las personas que presentaron denuncias a la Comisión, así como también en relación c las entidades e instituciones que le proporcionaron informaciones y testimonios. 

          Por su urgencia e importancia, la Comisión Especial entregó al Jefe de Estado, al concluir su visita, un documento de carácter confidencial, que contiene sus recomendaciones preliminares.  Asimismo, en su Comunicado de Prensa, la Comisión Especial expresó su reconocimiento público por las facilidades que le brindó el Gobierno para el cumplimiento de su misión y agradeció a las autoridades, los medios de comunicación, las distintas instituciones representativas de la comunidad guatemalteca y, en general, al pueblo de Guatemala, la cooperación y hospitalidad que le brindó.

 

F.            SEXAGÉSIMOQUINTO PERÍODO DE SESIONES 

          EL 65º período de sesiones tuvo lugar también en la sede de la CIDH, en Washington, D. C., del 24 de junio al 1º de julio de 1985, con la participación de todos sus miembros: Dres. César Sepúlveda, Presidente, Luis Adolfo Siles Salinas, Segundo Vicepresidente; Andrés Aguilar, Marco Gerardo Monroy Cabra, Gilda M. Russomano y Bruce McColm, a excepción de su Primer Vicepresidente, el Dr. Luis Demetrio Tinoco-Castro, quien tampoco pudo concurrir en esta oportunidad, por razón de su delicado estado de salud. 

          En este período de sesiones se procedió por la CIDH a renovar las autoridades de la Mesa Directiva para el año 1985, resultando elegidos el doctor Andrés Aguilar, Presidente; el doctor Luis Adolfo Siles Salinas, Primer Vicepresidente; y la doctora Gilda M. Russomano, Segundo Vicepresidente.  La Comisión dejó constancia de su reconocimiento a su anterior Presidente, doctor César Sepúlveda, quien con singular acierto presidió la Comisión los últimos dos años. 

          La Comisión en este período de sesiones aprobó un informe preliminar sobre la situación de los derechos humanos en Chile.  Asimismo, como resultado de la observación in loco efectuada en enero de 1985, adoptó también un informe preliminar sobre la situación de los derechos humanos en Suriname.  Ambos Informes, de conformidad con las normas reglamentarias correspondientes, fueron transmitidos a los Gobiernos de Chile y de Suriname, respectivamente, a fin de que si lo estimasen conveniente presentasen dentro del correspondiente plazo las observaciones que les pudieran merecer. 

          En esta oportunidad, la Comisión también decidió aceptar la invitación del Gobierno de Haití para realizar una observación in loco en ese país sobre la situación de los derechos humanos.  La fecha y otras modalidades de esa visita serán determinadas conjuntamente por el Gobierno de Haití y la Comisión, de conformidad con el Reglamento de esta última. 

          La Comisión consideró también el contenido del Informe Anual que debería presentar al XV período de sesiones de la Asamblea General de la OEA.  A ese respecto, además de aquellas materias que debería incluir de acuerdo a los reglamentos de la Asamblea General y la propia Comisión, ésta decidió incluir en dicho Informe un capítulo sobre la situación de los derechos humanos en Guatemala que, teniendo en cuenta especialmente la observación in loco que realizó la Comisión en el pasado mes de mayo, actualizara los anteriores informes sobre Guatemala. 

          La Comisión, asimismo, tomó conocimiento de las gestiones que el Secretario General ha realizado para que los Estados miembros de la Organización puedan pagar las contribuciones que adeudan y decidió expresar su más decidido apoyo a dichas gestiones.  En el caso de la Comisión, las restricciones administrativas y presupuestarias que ella está padeciendo como consecuencia de la crisis financiera de la Organización están limitando seriamente sus actividades, dificultando así la tarea que la Carta de la OEA le confirió para promover la observancia y la defensa de los derechos humanos. 

          También, la Comisión consideró diversas denuncias de alegadas violaciones de derechos humanos y la situación general de los derechos humanos en otros países.

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