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LA CIDH expresa preocupación por la situación en haití durante su 121° período ordinario de sesiones
Al concluir su 121° período ordinario de sesiones, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desea expresar su profunda preocupación por los acontecimientos en la República de Haití desde la visita de la Comisión a ese país a principios de septiembre.
Durante los últimos meses, la Comisión ha seguido recibiendo información sobre los acontecimientos en la República de Haití, incluyendo información presentada por varias organizaciones no gubernamentales haitianas durante una audiencia general convocada durante el 121° periodo ordinario de sesiones de la Comisión. En particular, la Comisión recibió información sobre numerosos actos de violencia que han ocurrido desde la visita de la Comisión a Haití a principios de septiembre, muchos de los cuales han sido perpetrados durante confrontaciones entre bandas armadas ilegales y la policía. Estas atrocidades incluyen un acto brutal el 30 de septiembre de 2004 en el que supuestamente dos policías fueron asesinados a tiros y decapitados. La Comisión deplora estos actos de violencia e insta nuevamente al gobierno a efectos de que tome las medidas urgentes necesarias para garantizar la seguridad de la población, desarmar a los grupos ilegales, investigar alegaciones de actos de violencia de ese tipo y, cuando se confirmen, procesar y castigar a los responsables de tales asesinatos y otras atrocidades, sean quienes fueren. La Comisión desea subrayar específicamente la urgente necesidad de ampliar la asistencia internacional para lograr la seguridad en el país y hace un llamamiento a la comunidad internacional a que fortalecer sus esfuerzos en este sentido.
La Comisión también está preocupada por las detenciones y arrestos arbitrarios que supuestamente han ocurrido durante los últimos dos meses, incluidos el arresto, el 2 de octubre de 2004, en Radio Caraïbe del Presidente del Senado haitiano y otros tres políticos asociados con el gobierno anterior de Haití, y el arresto y detención, el 13 de octubre de 2004, del Padre Gerard Jean-Juste en su parroquia en Port-au-Prince. En este sentido, la Comisión hace hincapié en la prohibición de detenciones o arrestos arbitrarios consagrada en el Artículo 7 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos, y reitera la obligación del Estado de garantizar que sus esfuerzos por investigar y procesar delitos se emprenden mediante procedimientos probadamente justos y eficaces, congruentes con las normas internacionales del debido proceso, incluido el derecho de toda persona detenida a ser notificada, sin demora, del cargo o cargos formulados contra ella y a ser llevada, sin demora, ante un juez.
Asimismo, la Comisión ha recibido información sobre amenazas y otros actos de violencia e intimidación perpetrados contra defensores de los derechos humanos, así como periodistas y medios de comunicación en el país, incluido el asesinato, el 13 de septiembre de 2004, del Reverendo Moleste Lovinsky Bertomieux, presentador de un programa diario en Radio Caraïbe. Tal y como la Comisión ha observado repetidamente en el pasado, la falta de disuasivos contra violaciones y actos de coerción de este tipo, ponen a los defensores de los derechos humanos y periodistas en situación vulnerable y, en la práctica, no les permite cumplir con su labor. La Comisión insta nuevamente al gobierno a efectos de que tome todas las medidas necesarias para investigar, procesar y prevenir actos de esta índole.
Por último, la Comisión desea expresar su empatía por las victimas de la tormenta tropical Jeanne, especialmente en la ciudad norteña de Gonaïve, donde se informa ahora que más de 2.000 personas han fallecido o se encuentran desaparecidas. En este sentido, la Comisión también denuncia los actos de grupos y bandas armadas, quienes según se informa han dificultado la distribución de la asistencia humanitaria para las víctimas del desastre, e insta a la comunidad internacional a que continúe proporcionando apoyo al gobierno y al pueblo de Haití para hacer frente a esta catástrofe.
La Comisión continuará realizando un estrecho seguimiento de los acontecimientos en Haití y seguirá proporcionando asistencia en el marco de su mandato a fin de superar los desafíos a los que se enfrentan Haití y su pueblo.
Washington, D.C., 28 de octubre de 2004 |
