COMUNICADO DE PRENSA

 

N° 18/03

 

LA CIDH CONDENA LOS HECHOS DE VIOLENCIA EN GUATEMALA

 

La Comisión Interamericana de Derechos Humanos condena los hechos de violencia que se registraron el  jueves 24 de julio de 2003, en Guatemala que incluyeron la utilización de la fuerza por parte de manifestantes con los rostros cubiertos, que portaban armas de fuego, palos y machetes. Los manifestantes rodearon de manera intimidatoria la Corte de Constitucionalidad, la Corte Suprema de Justicia, el Tribunal Supremo Electoral y la Procuraduría de Derechos Humanos, entre otras oficinas públicas, así como empresas privadas, medios de comunicación y oficinas de organizaciones de derechos humanos.

 

La Comisión lamenta la muerte del periodista de Radio Sonora y Noti 7, Héctor Ramírez. Asimismo, condena los graves incidentes de violencia contra los comunicadores sociales entre los que se incluyen el rociamiento con gasolina, golpes  y destrucción de equipos fotográficos. La Comisión considera que los actos de agresión contra los comunicadores sociales y medios de comunicación constituyen una amenaza al ejercicio de la libertad de expresión y surte un efecto negativo sobre el ejercicio de otros derechos humanos de toda la población.

 

Estos hechos acrecientan la preocupación expresada por la CIDH en torno a la vigencia del Estado de Derecho, durante su visita a Guatemala el pasado mes marzo y en el comunicado de prensa del día de ayer. En el contexto del proceso electoral que culminará con las elecciones generales de noviembre de 2003, el persistente deterioro del Estado de Derecho adquiere particular intensidad.

 

La Comisión Interamericana hace un llamado urgente a las autoridades del Gobierno de Guatemala para que asegure la vida e integridad física de todos los guatemaltecos y el orden público dentro del pleno respeto de los derechos humanos.  La Comisión insta al Estado de Guatemala a adoptar todas las medidas necesarias para asegurar la plena vigencia del Estado de Derecho en los términos de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y de la Carta Democrática Interamericana, en particular el desarrollo de las elecciones sin intimidaciones ni coerciones y la transparencia en todas las decisiones, administrativas y judiciales, que puedan afectarlo.  

 

 

Washington, D.C., 25 de julio de 2003